Anoche cuando volvía a casa, me llamó la atención ver junto a unos cubos de basura festivamente adornados con restos de papeles de colores y apoyado junto a grandes cajas de juguetes, un lienzo de mediano tamaño. Al acercarme y darle la vuelta para ver lo que pensaba sería una pintura, me sorprendí al ver que era un lienzo en blanco. Se habían desecho de un lienzo antes de empezarlo.
¿Algún frustrado regalo de reyes? Quizá pensaron que no merecía la pena.
Lo lleve a mi taller y después de quitarle algo de suciedad donde había estado en contacto con el suelo lo apoyé junto al resto de lienzos preparados para ser pintados
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